Bueno, después de tanto tiempo sin postear en el tema, me apetecía pasarme para poner varias recetas y completar junto al risotto de xoDet lo que podríamos considerar como "la más-o-menos ruta del arroz y la seda de andar por casa". Esta vez no me explayaré demasiado porque me conozco y se que acabaría divagando de unas cosas y otras, así que sin más preámbulos... Primera parada, lejano oriente:
Ternera Bulgogi con arroz
- Spoiler: Mostrar
Esta ha sido mi comida de hoy, y es ideal cuando te apetece algo rápido, sencillo y sabroso o cuando no estás seguro de hasta qué punto la ternera que tenías en la nevera estaba en un estado óptimo para el consumo humano (sólo para que conste en caso de que haya alguien preocupado por lo que me pueda pasar: aún no estaba de color verde). Cada uno tendrá sus preferencias, pero yo suelo usar un filete de ternera (un corte normalito, no muy caro), sésamo, ajetes tiernos, y arroz basmati.
Comenzaremos poniendo a marinar durante unas horas la ternera cortada en trozos en un cuenco de salsa (disponible en el establecimiento de dudosa legalidad más cercano. En caso de que no haya, siempre podéis optar por hacerla vosotros mismos o hacer ternera teriyaki, que es más fácil de encontrar). Lo ideal es que la dejéis por la mañana preparada para que al llegar a casa la tengáis a punto.
Para empezar, ponemos a calentar agua con sal y aceite para el arroz (a mi me gusta cocer con laurel siempre, por cierto), y vamos salteando los ajetes con el sesamo en el wok a fuego vivo.
Al romper a hervir echamos el arroz hasta que quede a nuestro gusto, y mientras tanto echamos el marinado de ternera a los ajetes para que se vaya haciendo a fuego medio para que no se evapore la salsita.
Cuando esté hecho, escurrimos el arroz y lo juntamos con el resto dándole algo más de brío al fuego para que quede con un punto frito y se chupe la salsa.
En unos quince minutos tendréis la comida, ideal para los que usan la excusa de que se pierde mucho tiempo cocinando. Ahora, nos movemos a Thailandia para ver la receta de...
Curry verde de pollo.
- Spoiler: Mostrar
Receta de Crushing, la primera vez que nos la hizo en una quedada consiguió que unas seis o siete personas sufrieran sudores repentinos, abrasiones estomacales y sangrado fecal de forma prácticamente simultánea. Y a pesar de ello, todo el mundo acabó su plato, lo que dice mucho a su favor.
Para hacerlo, necesitaremos de unas pechugas de pollo limpias, arroz basmati, cebolla, leche de coco (sustituible por nata para cocinar), vino blanco (o brandy, whiskey... lo que tengáis por ahí. Una vez le eché anís y no estaba mal), y pasta de curry verde (de cuanta más dudosa procedencia, mejor).
De nuevo, comenzamos por poner el agua a hervir en una cacerola, y mientras cortamos el pollo a dados y la cebolla picadita. La sofreímos y cuando vaya estando echamos el pollo hasta que se dore.
Para entonces debería haber roto a hervir el agua, así que echamos el arroz basmati, y tiramos pasta de curry al gusto a la sarten donde tenemos el pollo y la cebolla (la primera vez que lo hagáis tened cuidado, porque el curry verde es infernal y se os puede ir mucho de las manos hasta el punto de que ni siquiera lo podáis comer). Le damos unas vueltas y vertemos vino blanco al gusto a fuego rápido para que se reduzca y vaya haciendo una salsita con la pasta de curry.
Cuando haya reducido, le echamos la leche de coco/nata, y lo mantenemos a fuego medio para que continúe haciéndose y trabándose hasta que apartemos el arroz y lo pongamos a escurrir.
Llevamos a la mesa el arroz y la sartén con el curry, para que cada uno se lo junte en las proporciones que quiera. Perdonad la poca calidad de la foto, pero es que no tenía nada mejor a mano y me apetecía poner esta receta ^^u
Y ahora, como última parada en la ruta arrocera, nos vamos a la provincia de Alicante para ver cómo se hace el...
Arroz con costra
Este es un plato que llevaba tiempo queriendo probar, y este viernes aproveché que comía con una hellinense y un ilicitano para que me enseñara a hacerlo. Plato propio de
la Vega Baja del Segura, la denominación de origen exacta es peleada por Orihuela y Elche y ha dado lugar a una de las luchas intestinas más chorras y encarnizadas que he conocido en mi vida (si conocéis a uno de Orihuela, probad a decirle que el arroz con costra es de Elche y ya me contáis).
A grandes rasgos, es un arroz seco de embutido con una costra de huevo batido al horno, lo que genera un sabor lo suficientemente raro como para que merezca la pena probarlo.
- Spoiler: Mostrar
Necesitaremos (sin cantidades exactas, cada uno que compre lo que considere) conejo y pollo troceado, salchichas (o longanizas, que cada uno las llama de una forma), butifarra blanca, y butifarrón negro o morcilla (que no sea de arroz).
Comenzamos por calentar aceite en una sartén para ir friendo el embutido por tandas que ya habremos cortado en trozos uniformes previamente. Hacéis el butifarrón, lo apartáis, seguís con el blanco, retiráis, y luego lo mismo con las longanizas.
Tened cuidado sobre todo con el butifarrón negro, porque si no lo dejáis bien hecho, se os deshará más adelante cuando estéis haciendo el arroz.
Una vez que tengáis hecho y apartado el embutido, sobre el mismo aceite doráis el conejo y el pollo (la sal la váis añadiendo a cada tanda de carne al gusto, por cierto), y cuando creáis que ya están, añadís tomate rallado para hacer el sofrito base.
Encendemos el horno a 200º para que se vaya calentando y, en un recipiente grande (una paellera iría bien) pondremos a calentar agua y echaremos el sofrito de pollo, conejo y tomate. Le añadimos azafrán y lo dejamos hervir a fuego medio un tiempo hasta que consideremos que es momento de echar el arroz y el embutido que habíamos dejado apartado a la paellera.
Mientras el arroz se va tragando el caldo (debe quedar practicamente seco en el momento de entrarlo al horno), vamos batiendo los huevos que usaremos para hacer la costra del arroz. Según me dijo son dos huevos por persona más uno extra para que sean impares, lo cual me encantó por lo absurdo que resulta ^^
Una vez esté el arroz, lo echamos en una cazuela de barro (después de hacer arroz al horno hace unos meses, conseguí hacerme con una cazuela de aluminio fundido que es ideal para hacer el arroz en la vitrocerámica y luego meterlo al horno), vertemos los huevos batidos, e inmediatamente introducimos el recipiente al horno.
Cuando veamos que la costra ya ha subido, ha cogido un color dorado y se ha endurecido, será el momento de sacar el arroz y servirlo.
PD: Y de entrante, en honor a uno de los habituales del tema...
- Spoiler: Mostrar
- Una de clóchinas con foto de los establecimientos de temporada monoproducto que pueblan mi barrio hasta agosto.
PD2: Bueno, pues con esto ya tenemos platos de arroz de Lejano Oriente, Oceanía, Italia y España...
Eli Lawliet o
Wild Animal, es vuestro turno de recoger el guante y convertir la "la más-o-menos ruta del arroz y la seda de andar por casa" en una vuelta al mundo