Esta es mi pequeña aficción/vicio: los juegos de mesa. Me da igual que sean juegos de rol, de cartas, con fichas, escribiendo cosas en un papelito, o a veces incluso sin necesitar nada.
Me ha extrañado que con el perfil de gente que suele participar en un foro de One Piece no hubiese un tema con esta temática. Al menos he estado revisando los temas de Offtopic y no he visto ninguno similar. Solamente el tema de las cartas Magic.
La intención de este tema es dar a conocer a la comunidad PK juegos a los que he podido jugar y que me parecen divertidos. Y también que vosotros recomendéis juegos que os gusten. Y quien sabe, puede que surjan ideas para adaptarlas a un formato que podamos jugar entre los foreros en una fututa Guerra de Bandas o como juegos independientes (guiño guiño).
Y aquí una serie de juegos a los que he podido jugar recientemente:
Jugadores: de 2 a 6 (aunque yo he llegado a jugar con más personas con las cartas de la expansión).
Inicio: se reparten 3 cartas a cada jugador. Cada jugador echa una carta por turno y repone cogiendo una carta del mazo. También se puede descartar de tantas cartas como quieras y reponerlas, pasando el turno al siguiente.
Funcionamiento: existen cartas de órganos (cartas la fila de arriba), cartas de medicinas (cartas de la fila de en medio) y cartas de virus (cartas de la fila de abajo). En cada turno se puede sacar una carta que te pones a ti mismo (órganos y medicinas) o al rival (virus). 2 cartas de virus destruye un órgano, mientras que 2 cartas de medicinas inmuniza de virus al órgano. Una carta de medicina elimina una carta de virus y viceversa. Además existen cartas de acción para robar órganos, cambiar las cartas, etc.
Objetivo: conseguir sacar cuatro cartas de órganos sanos, es decir, sin ninguna carta de virus encima. Las cartas con medicinas se consideran órganos sanos. Se puede ir de buen samaritano y colocar medicinas y órganos a rivales, cada uno decide la estrategia a utilizar.
Conclusión: es un juego que enseguida pilla la gente y se puede volver muy adictivo. Por lo general las partidas son rápidas. Yo lo recomiendo totalmente. Con la expansión te vienen más cartas de órganos, nuevos virus, medicinas y cartas de acción.
Jugadores: de 3 a 10.
Preparación: se reparte una carta de rol para cada jugador (que sólo conoce él). Existen a groso modo dos tipos de roles: los enanos que intentarán llegar hasta la pepita de oro, y los saboteadores que impedirán que los enanos lleguen a dicha pepita. El área de juego es de 5x9 cartas (con un tapete en el que aparezcan los espacios que ocupan las cartas se tiene una mejor idea del área, aunque no es imprescindible). Se coloca en un lado una carta de túnel con el dibujo de una escalera (entrada al túnel), desde donde se iniciará el juego. En la otra extrema se colocan boca abajo la carta de pepita de oro y otras dos cartas de pepitas falsas.
Inicio: se reparten de 4 a 6 cartas de acción y/o cartas de túnel (depende del número de jugadores). Cada jugador echa una carta por turno y repone cogiendo una carta del mazo.
Funcionamiento: en cada turno el jugador colocará una carta de túnel de forma que concuerden con las cartas de túneles adyacentes. También se podrán usar cartas de acciones que impide jugar al jugador que se la eches (así como su contraparte para poder volver a jugar). Además existen otras cartas de acción con otros objetivos: mirar donde está la pepita, conocer el rol de una persona, etc.
Objetivo: los enanos tratarán de llegar a la pepita de oro creando un camino colocando cartas de túnel. Los saboteadores intentarán sabotear el camino colocando túneles derrumbados o túneles sin salida. El juego se acaba cuando se consiga realizar un camino desde el inicio hasta la pepita (ganan los enanos) o cuando se agota las cartas del mazo (ganan los saboteadores). Los ganadores recibirán puntos en función del número de ganadores. La idea es realizar varias partidas y gana la persona que más puntos reúna.
Conclusión: esto es una explicación simplificada, pero la esencia del juego es conseguir construir un túnel hasta la pepita de oro (o evitarlo). Es un juego más largo que el Virus (sobre todo si queréis hacer varias rondas). Pero muy disfrutable y sobre todo por los piques por averiguar que rol desempeña cada jugador. También dispone de una expansión, aunque en este caso no he podido tener la oportunidad de probarlo.
Las pruebas que hay que realizar son similares a la versión original del Party, pero con algunas variantes interesantes:
- Dibujar lo que aparezca en la tarjeta.
- Hacer mímica sobre lo que aparezca en la tarjeta.
- Acertar el contenido de la tarjeta con preguntas de sí o no. La variante se encuentra en que no se puede decir "sí" o "no", si no frases o gestos que te indique unas fichas especiales para esta pruba. Ejemplo: para responder "si" tienes que poner cara de placer y para decir "no" tienes que poner cara de asco.
- Leer la descripción de la tarjeta pero con un impedimento que decidirá un dado: leer con la boca cerrada, con la lengua fuera, poniendo boca de O, etc.
También hay casillas especiales en el que tienes que hacer la prueba correspondiente con algún impedimento más. Ejemplo: te toca dibujar pero bailando twerking.
Jugadores: 2 equipos de hasta 5 jugadores por equipo.
Inicio: se reparten hasta 6 tarjetas diferentes a cada equipo. Cada equipo parte de la casilla central.
Funcionamiento: cada equipo en su correspondiente ronda tiene que hacer girar el reloj de arena. En lo que dure el tiempo, cada equipo tiene que hacer tantas pruebas como pueda (donde uno hace la prueba y el resto adivina). La ronda acaba cuando se acabe el tiempo o cuando se adivinen las 6 tarjetas del equipo. Al final de cada ronda se reponen las tarjetas para el equipo con unas nuevas del mazo.
Objetivo: alcanzar un número de puntos. Cada tarjeta adivinada tiene una puntuación que aparece en la propia tarjeta. No me acuerdo si esa puntuación viene definida por el propio juego o lo pusimos nosotros, porque no eramos muchos y adaptamos el juego a esa circunstancia. Pero una de las reglas que el propio juego te dice es: "el juego será tan difícil como vosotros queráis". Así que no os sintáis mal si decidís modificar normas.
Conclusión: este juego es el último que he jugado y lo trajo otro colega. Es divertido pero más divertido es cuando no te toca a tí. Se me hizo un poco pesado por la dificultad de las tarjetas y porque me tocaba siempre la prueba de la lectura sacando la lengua fuera. Recomendado para todas esas personas que no saben lo que es la vergüenza y no les importa estar la mitad del juego con la lengua fuera enseñando hasta el empaste del último molar.