El Faro escribió: ↑Vie Ene 27, 2023 11:30 pmLuffy en sí
es un personaje carente de ambigüedades tanto en sus objetivos como en su forma de actuar, con muy raras ocasiones en las que actúa de manera inesperada.
Pero Luffy no es complejo.
Los eventos que vive a lo largo de la serie rara vez cambian su forma de ser o sus ambiciones y a falta de saber cuál es su verdadero sueño, hasta ahora
sus motivaciones para lograr algo rara vez fueron más allá de los evidentes.
Volvamos al mismo punto. Entiendo que para vosotros estas son las cosas que separaran a un personaje simple o plano de uno complejo o profundo. Pero es que yo no considero que ese sea el único parámetro que debamos aplicar siempre para determinar esto. Yo por ejemplo evaluó el grado de complejidad de un personaje basándome en qué tanto puedo conocer de él, o dicho de manera más simple, que tanto se ha esforzado el autor por construir y definir un perfil. Doflamingo podrá ser un personaje muchísimo más ambivalente que Luffy, ambiguo, complicado, y aún así me parece un personaje más simple que Luffy por la única razón de que conozco más en profundidad y en mejor calidad a mugiwara. Tan sólo en el East Blue sé:
-Que Luffy puede ser egoísta si le sirve a sus objetivos. Conseguirá las espadas de Zoro a base de chantajearlo con que se una a su tripulación.
-Que puede actuar de manera inteligente. Cuando provoca a Coby para que le pegue lo hace con la intención de ayudarle aunque Coby no lo sepa en primera instancia.
-Que no necesita usar palabras para comunicar sus acciones. Cuando se quema la tienda de Shushu, Nami lo enjuicia como otro bastardo pirata, pero este pasa de ella, se sienta al lado del perro y le entrega la única bolsa de comida que pudo rescatar de la tienda (la gente se va haciendo a la idea de la personalidad que tiene Luffy a través de sus acciones y no tanto de sus palabras, ojo con esto)
-Luffy sabe el impacto que tiene la imagen de un pirata en las personas, independientemente de su actos. Cuando escapan del pueblito de Shushu le explica a Nami que no tiene caso tratar de convencer a la gente de allí que los han salvado porque de todas formas no le creerían.
-También sabe captar y valorar lo que pueda estar sintiendo otra persona cuando para otros no resulte tan evidente. Este es uno de sus puntos y cualidades más fuertes como personaje. Como cuando decide no bajarle los cofres a Gaimon o cuando decide creer en Nami aún con todo lo que tenía en contra.
-Se perfila su gran amor por la piratería en escenas tan simples y cotidianas como cuando habla con Nami acerca de su sombrero. Cuando se queda hablando con Usopp (un desconocido) sobre su banda pirata favorita (y se ve como ambos hacen match al instante hablando con ilusión sobre este tipo de cosas) o cuando escucha el sueño de Sanji de manera eufórica. Aunque parezca relleno, todo esto sirve a su construcción de personaje.
-También conocemos sobre su manera infantil o bobalicona de ser, actuar u hacer bromas en situaciones cotidianas. Como cuando se pone a jugar con Usopp con los cañones del Merry o cuando intenta meterle un moco a la bebida de Zoro en el Baratie.
-Sus combates también sirven para mostrarnos qué tipo de ideales tiene frente a otros piratas. El valor de los tesoros para él en su pelea contra Buggy. El valor de sus tripulantes en su pelea contra Kuro. El valor de los sueños en su pelea contra Krieg. La utilidad de sus nakamas en su pelea contra Arlong. Cada nueva pelea sirve para definir el tipo de pirata que es Luffy y bajo que óptica ve la vida (que es más que la superficie de quedarse con darse de hostias para resolver un problema).
Por todas estas pequeñas y a simple vista irrelevantes cosas, Oda va definiendo un perfil muy claro y consistente de personaje, esto sin que tenga yo que sobreanalizar lo que se esta mostrando en pantalla. La gente que conoce a Luffy lo ve como un pirata enorme y lo sigue. El lector lo puede ver como un tipazo y enfatizar fuertemente con él. Y todo esto mostrando más que contando. Porque sí, Luffy podrá ser muy simple en cuanto a objetivos o manera de ser, pero es que su complejidad esta a través de todo lo que se va construyendo entorno a sí para que sea un personaje íconico, distintivo y fuerte, y haga más sentido que la gente le tenga un cariño genuino y no impostado sólo por ser el protagonista que siempre salva el día. A mí me puede decir más la manera de ser de Luffy, con la forma en que Oda dibuja su cuerpo y expresiones (que el dibujo también es una forma de comunicación acá) cuando está hablando con Sanji, que Kishimoto haciendo que Naruto de grandes y largos discursos sobre la soledad, el dolor y el sufrimiento (donde el personaje es más un recipiente que un punto de referencia).
Por eso pueden parecer insignificantes y tontos detalles como que Luffy dibuja pésimo, que le gustan los escarabajos o que su parte favorita es el mascarón de un barco, pues todo eso es tratado casi sin relevancia dentro de la historia, pero es que precisamente son esos pequeños detalles los que me permiten conocer a Luffy, hacerme una idea de qué tipo de persona es o cómo actuaría ante tal situación, diferente a personajes que sólo tienen conflictos internos o reflexiones profundas sobre un tema particular, pero que luego no logro conocer tanto sobre ellos como creía. Por eso creo que si se quieren captar todos los matices que forman la personalidad de Luffy, superficial es quedarse con que es un personaje plano y simple que con gritar mucho basta para escenificar (lo que seguro hará Iñaki en su interpretación).
Igualmente esta es mi perspectiva, cada persona tiene una visión de lo que considera simple o complejo, plano o profundo, o si esto es malo, bueno o no tiene nada que ver con la calidad de un personaje. Yo simplemente no estoy de acuerdo con que la complejidad de un personaje tenga que estar encerrada en sus objetivos o en si va mutando de objetivos a través del tiempo. De hecho mientras más "complejidad" o "profundidad" quieras meter en un personaje peor, porque a menos que seas muy buen escritor (casi ningún mangaka lo es porque este no es su campo) es difícil que todo eso que quieras contar llegue a buen puerto, y no quede en una palabrería pobre de preescolar, que en el menor de los casos será percibida como que eres pretencioso tratando de tocar temas complejos sin tener la capacidad para ello. Además que más mérito tiene contar las cosas mostrando o con pocas palabras, porque aunque parezca más simple, es más difícil conseguir esto. En fin que acá lo voy dejando porque es un tema del que se puede hablar largo y tendido, pero eso, que hay demasiado de donde rascar cuando hablamos de personajes, más que sólo ceñirnos a un patrón y echarnos unos jajas si aparece una persona con otra visión de interpretar las cosas.